El Blackjack es un juego con muchas características avanzadas que si se usan bien dan ventaja a los jugadores en la mayoría de situaciones. La mayoría de jugadores, sin embargo, no consiguen entender dichas características y opciones y por lo tanto no llegan a ser ganadores de blackjack.
Las decisiones más importantes en el blackjack son rendirse, asegurar, dividir y doblar. Desafortunadamente la mayoría de jugadores no saben cómo usar correctamente dichas características para asegurarse un margen competitivo sobre el casino. El objetivo de este artículo es aclarar dichas opciones.
Rendirse en el Blackjack
Rendirse es una parte integral del blackjack. Rendirse permite a los jugadores abandonar su mano y recibir de vuelta la mitad de su apuesta. En la mayoría de casinos online, sin embargo, la opción de rendirse se ha eliminado para facilitar el juego a los nuevos jugadores. Estos casinos ofrecen una alternativa llamada Blackjack Surrender que es un tipo especial de blackjack que contiene la característica de rendirse.
Los juegos de blackjack tradicional normalmente ofrecen sólo una de las dos versiones de la característica de rendirse que son: rendirse antes y rendirse después. Rendirse antes es cuando el jugador no ha tomado aún ninguna decisión (como ir, etc.). Rendirse después se ofrece cuando el jugador ya ha tomado una decisión como aceptar una nueva carta y la carta descubierta del dealer no es un 10 o un as.
¿Cuando rendirse?
En los juegos normales de blackjack que ofrecen la característica de rendirse antes, los jugadores sólo se pueden rendir cuando la carta descubierta del dealer es un 10 o un As. Sin embargo, los jugadores no deben rendirse siempre que la opción esté disponible.
Cuando dicha opción se encuentra disponible, únicamente merece la pena rendirse cuando la mano inicial es inferior a 15 puntos, porque en esa situación estadísticamente tiene mayores posibilidades de perder que el dealer. Esto significa que rendirse en esas situaciones le ahorrará más dinero que el dinero que pueda ganar no rindiéndose y ganando la mano ocasionalmente.
Rendirse después es muy complicado porque cada situación es distinta. En la mayoría de casos, no se recomienda rendirse después en el juego porque el dealer en esas situaciones no hará un blackjack. No hay una ventaja estadística respecto a rendirse en dichas situaciones; los jugadores deben probar suerte y terminar la ronda con normalidad.
Asegurarse en el Blackjack
Otra característica avanzada en el blackjack es asegurar. Está opción está disponible si la carta inicial descubierta del dealer es un As. Asegurar requiere que el jugador realice una apuesta adicional equivalente a la mitad de la apuesta inicial. En caso de que el dealer gane la ronda formando un blackjack, el jugador perderá la apuesta adicional pero ganará la apuesta normal.
¿Cuándo asegurar?
En pocas palabras: nunca. Asegurarse se dice que es una apuesta de bobos, porque no ofrece una ventaja estadística a los jugadores. En general, cuando la carta descubierta del dealer es un As, es muy probable que el dealer no forme un blackjack. Asegurar en esos casos es arriesgarse a perder tanto la apuesta adicional como la normal.
Incluso si el jugador consigue ganar la ronda, el dinero recaudado será mínimo porque la apuesta adicional se perderá. Así que no importa cómo analicemos esta situación, asegurar no es nunca provechoso. Al contrario de lo que pasa con la opción de rendirse, los casinos normalmente no eliminan esta función porque les ofrece ventaja sobre el jugador.
Dividir en el Blackjack
Dividir en el blackjack significa separar las dos cartas iniciales en dos manos distintas. Dividir sólo es posible cuando las dos cartas iniciales recibidas forman una pareja. Después de dividir los jugadores deben realizar una nueva apuesta para la nueva mano que sea de la misma cantidad que la inicial.
Después, el dealer repartirá una nueva carta para cada mano. A partir de ahí los jugadores juegan con dos manos al mismo tiempo. No hay reglas especiales acerca de dividir. Después de formar una nueva mano, los jugadores juegan de forma normal, como si jugaran con una sola mano (ir, plantarse, doblar, etc.)
Dividir una mano no ofrece necesariamente una ventaja a los jugadores. Simplemente ofrece la posibilidad de jugar con dos manos a la vez, algo que ofrece más emoción de lo normal. Si los jugadores no tienen miedo de realizar apuestas extra (o de perder dinero extra), dividir cuando se tiene una pareja no es mala opción.
Doblar en el Blackjack
Otra opción popular en el blackjack es doblar. Doblar se permite solo al inicio del juego cuando los jugadores reciben sus dos primeras cartas y no han tomado otras decisiones todavía. Doblar significa realizar una nueva apuesta sobre la mesa que será equivalente a la apuesta inicial.
Cuando se dobla, automáticamente se recibe una nueva carta. Sin embargo, después de ello los jugadores no pueden pedir otra carta. Por lo tanto, doblar se debe usar sólo cuando el jugador espera no necesitar otra carta después de que se le reparta la carta al doblar.
¿Cuándo doblar?
Generalmente, doblar es recomendado cuando el valor de la mano inicial del jugador es 10 u 11 y la carta descubierta del dealer es baja, porque en esas situaciones el jugador no puede perderlo todo por pasarse. El valor máximo posible que se puede formar en este caso es 21.
Puesto que el dealer tiene una carta descubierta de poco valor, es posible que necesite repartirse varias cartas para llegar al menos a 17 (recuerde, el dealer está obligado a conseguir un resultado por debajo de 17). Así que en dicha situación las posibilidades están a favor del jugador, por lo que merece la pena arriesgarse a doblar.
